Seguidores

viernes, 9 de diciembre de 2011

Mil cuatrocientos sesenta días

Si tuviera que describir de alguna forma este tiempo, lo haría diciendo que han sido los mejores cuatro años de mi vida. ¿Y sabes por qué? Porque he podido contar con alguien como tú a mi lado, una de las personas que, sin duda, permanecerán siempre en mi memoria -y en mi corazón-, pase lo que pase.


Hace algún tiempo, más del que creo recordar, me dijiste que cuando una persona te importa, se merece todas las oportunidades del mundo, y nunca merece caer en el olvido. Tú eres una de esas personas.
Los dos sabemos que hay cosas que no deberían haber pasado, y otras muchas que, en cambio, si deberían haberlo hecho. Aún así, el tiempo ha terminado dándonos la razón, aunque quizá no del modo que esperábamos, pero estamos juntos en esto, y eso es lo importante.


Cuando te conocí (o incluso hace escasos meses) no me hubiera imaginado que llegaríamos hasta aquí, que íbamos a superar todas las dificultades que hemos superado ni que te iba a querer tanto como te quiero.
Eres ese tipo de persona que se esconde, que se cierra en si mismo pero que no es cobarde. De los que van con la verdad por delante y de los que darían su vida por quien quiere.
Siempre has ante puesto la felicidad de los otros a la tuya propia, y siempre has intentado ayudar en todo lo posible, ya fuera un problema de clase o en algo más personal. y eso te honra, porque nunca has pedido nada a cambio.

Para mi eres la persona más importante que tengo, por la sencilla razón de que eres el único que ha hecho que sonría todos y cada uno de los días de mi vida. Porque me has entendido y apoyado, y sobre todo, porque me has estabilizado en todos los sentidos posibles. Me has aportado todo, y es lo que más te agradezco, que me hayas llenado y complementado de esa manera tan plena, y tan pura.

Gracias por hacerme ver que no hace falta ver a una persona para quererla y ser feliz.

Durante estos cuatro años hemos pasado tanto buenos como malos momentos, y tú lo sabes bien, pero a pesar de eso, siempre hemos estado el uno para el otro. Contigo siempre ha sido distinto, ese algo. Los silencios nunca han sido incómodos contigo y las conversaciones nunca se han terminado aún hablando durante días enteros parando 6 o 7 horas para dormir.

Eres lo mejor que me ha pasado en la vida y la única conclusión que saco de estos cuatro años es que no quiero separarme nunca de ti. Solo puedo agradecerte cada día que has pasado a mi lado. Cada palabra, sonrisa robada, hora al otro lado del teléfono, actualización, foto, twitt, carta. Por cada reconciliación, canción, tontería. Gracias por cada mes que has pasado conmigo, que ya son cuarenta y ocho. Por cada instante en los que me dejaste sin respiración. Por hacerme soñar despierta, por cada promesa todavía por cumplir. Cada secreto que me has contado y del que me has hecho partícipe, que me ha demostrado que con pequeños detalles puedes demostrar más cosas que con cualquier hecho es imposible.
Y gracias a ti, por ser tu y no cambiar conmigo. Por ser NOSOTROS



Mi elección eres tu. Te elegí a ti, y siempre vas a ser tu mi elección, y mi prioridad.
Gracias por otro nueve a mi lado; este más especial que el resto.




I LOVE US                                             #91207

No hay comentarios:

Publicar un comentario